- Entrevista a Wifredo Espina
- 'Caso Pujol', un misterio
que huele muy mal
- No habrá consulta, como
quiere Mas
- Entrevista del director de Diario de
Tarragona, Josep Ramon Correal, al periodista decano en activo español, Wifredo
Espina, sobre el 'caso Pujol', la Consulta catalana y el Periodismo
-
- JR.Correal:
-Su olfato periodístico qué le dice:¿Habrá consulta el 9-N?
- Wifredo Espina: -De la forma como se pretende hacer, no la habrá. Si se
quieren organizar simulacros de consulta, sin validez, nadie podrà impedirlo;
ya se hicieron, pero no sirvieron de nada. Seguramente, el president Mas -si
aun lo és- firmarà la convocaroria, para que no se diga que se ha rajado, pero
sabiendo que hace el ridículo, porque ni jurídica ni políticamente lo puede
hacer. Siendo el representante legal del Estado en Catalunya y habiendo jurado
o prometido en su toma de posesión 'cumplir y hacer cumplir la Constitución',
cometeria una grave ilegalidad, prevaricación. Además, ha dicho que no haria
nada ilegal. Para ello, para desafiar las leyes, antes deberia dimitir de los
poderes que estas leyes le han dado, y ponerse al frente de un movimiento
cívico legítimo pero contrario a la ley. És previsible, incluso, que el 'choque
de trenes' sea con Junqueras, ya que éste va a piñón fijo, y Mas no querrá
estrellarse ni perder la presidencia.
- ¿Què salida le
queda a Artur Mas?
- Dimitir, convocar elecciones o aplicar su (negado)
'plan B'. Quizás, este
último sería la menos trumática salida, para él y para el pais. Se trataria
de aplazar -o simularlo- la consulta
para el final de su legislatura en 2016, intentando que las elecciones fueran o
parecieran plebiscitarias en torno al derecho de autodeterminación. Artur Mas, así, no renegaria de la consulta
y podria seguir gobernando e intentar recuperar confiança y votos durante este
tiempo. Posiblemente, el Gobierno central veria con buenos ojos esta jugada, ya
que, por una parte, no puede permitir la consulta y, por otra, la caida de Mas
en unas elecciones anticipades, con un Junqueras ganador, la situación se agravaria
considerablement. Seguramente, también seria bien visto por los sectores moderados –cívicos, políticos y económicos- ya que estabilizaría, de momento, la situación y dentro de dos años la correlación de fuerzas políticas en España puede ser distinta,
permitiendo nuevos planteamientos a la reivindicación soberanista.
- El 'caso
Pujol', ¿tumba el
proceso soberanista?
- El soberanismo no se lo 'tumba' ni con el 'caso Pujol'
ni sin este 'caso'. De alguna forma ha existido siempre Seguirà y quizás vaya en aumento, según se jueguen las cartas aquí y en Madrid. Últimamente, se le ha dado
mucho aliento desde el centralismo español y desde las propias intituciones gubernamentales
catalanas. Otra cosa distinta es el llamado 'proceso', que ha recibido un duro
golpe en la credidibilidad de sus líderes, aunque Jordi Pujol no ha sido un ferviente
independentista. A muchísima gente le ha caido la
venda de los ojos, no todo era buena fe ni limpio. Como ha manifestado Rigol,
esto hace mucho daño al
'proceso'. Dependerá de
como vaya derivando en relación al 'mito Pujol' y de si sus ramificaciones se
extienden, pudiendo llegar a salpicar al propio Artur Mas, ya que se dice que,
de alguna manera, conocia el tema, lo cual sería fatal. No solo el soberanismo, sino incluso el
catalanismo moderado, perdería prestigio aquí y fuera. Los poco amigos de Catalunya, sin duda, lo
aprovecharian a fondo. Y ya lo hacen antes de aclararse este obscuo,
escandaloso y sucio 'affaire'.
- Usted conoce
bien al ex Honorable. ¿Cómo se explica que cometiera un error de tanta
magnitud?
- Para mi es un misterio, que huele a putrefacto. He
valorado y valoro muchas cualidades de Jordi Pujol.
Como su inteligencia, cultura, sagacidad, capacidad de comunicación... Lo
último que podia esperar de él es un afan de enriquecimiento personal o familiar,
cayendo en procedimientos ilícitos. Su ánsia de poder es conocida, y para
satisfacerla no tiene muchos miramientos. Los casos Banca Catalana, Banco
Industrial, Correo Catalán y Destino, que se hundieron en sus manos, son
ilustrativos. Creía que para hacer
política -que al principio llamaba 'hacer pais'- es necesario tener poder
económico y mediático y se dedicó a ello, por lo visto no siempre de forma
clara y honesta. Y este poder económico y mediático lo ponía al servicio de su
personal ambición y de su idea de Catalunya, de la que siempre discrepé,
pública y privadamente. Tiene una concepción demasido romántica, cerrada y
excluyente. Esto no fue obstáculo para un mútuo respeto y un diálogo que yo
creía sincero. Ciertas confesiones sobre temas delicados me lo hacían pensar
así. Todo lo ponia a su servicio y de su plan político. Es muy autoritario e
intervencionista y tiene una alta consideración de si mismo y de su autoridad.
Cuando salia de su despacho para coger el coche oficial, sonaban todas las sirenas
del Palau para que toda la guardia le rindiera pleitesia y los chóferes
estuvieran a punto: !salia el virrei!. Fue un error, cuando el "caso Banca
Catalan" querer identificar Pujol con Catalunya, con una manifestación a
favor de Pujol como símbolo de Catalunya. Una comisión de los organizadores
vinieron a verme en El Correo exigiéndome poner en la portada que habia medio
millon de manifestantes. Como director en funciones me negué, alegando que los
datos oficiales y periodisticos decían que mucho menos; puse las distintas
cifras, pero no en el título. Me la
jugaba, claro.
-
- ¿Pujol pasará a la
historia como un miserable?
-
- Alguien ha dicho que
'un mal morir' no deshonra toda una vida. En este caso, las informaciones
parecen indicar que el pecado, confesado en parte y que ahora está dispuesto a
expiar, ha durado muchísimos años. Como en una doble vida. Esto deberá
aclararlo y valorarlo la Justicia, no las impresiones ni las informaciones
parciales periodisticas o policiales. No será fàcil, dada la complejidad del
tema, las múltiples complicidades, sus ramificaciones internacionales y su
evidente e inevitable politización. Muchos han tenido una enorme prisa en
denigrarle, en despojarle de todos sus honores y privilegios, en tomar
distancias de él, seguramente para tapar o hacerse perdonar su complicidad. Ya
no quieren ser considerados del clan, de la 'trama'. La propia confesión pública
de Pujol sobre la fechoria ha dado pié a esta reacción de enemigos, adversarios
y amigos, e incluso de quienes lo consideran su 'padre político' pero que ahora
no quieren que les estorbe su propia
carrera política.
Desde luego, las páginas
positivas de su biografía se
veran sepultadas por las más miserables. Esto es, seguramente ya desde ahora, su
principal preocupación; no
pasar a la historia como el gran lider y padre de su país, Catalunya.
- ¿Es creíble la versión de que se ha autoinculpado para salvar a los hijos?
- Este misterio del 'caso
Pujol' está envuelto de muchos misterios. Y el aspecto familiar –de padre y de
esposo- puede ser uno de ellos. Sospechosamente, la família no ha sido
precisamente muy diligente en defenderle, al menos hasta ahora. ¿Autoinculparse
por unos hijos que no parecen muy agradecidos? Un posible arrebato suyo no es
descartable, pero ¿de qué serviría ante la Justicia? Hay que ver el testamento
de su padre, la cuantía de que se habla y la real, y el origen de esta fortuna.
Un hipotético acto de inmolación expiatoria –propia y para otros- no resolveria
nada. Quizás, para ganar tiempo y embrollar más el proceso judicial. El mismo
ex honorable acaba de declarar que 'quizás soy más burro de lo que la gente
creia'. Palabras también misteriosas en boca de un personaje tan astuto y
bregado en los vericuetos de la política y la politiqueria.
- Usted no ve
claro que la independencia sea una buena opción para
Catalunya....
-
- Es una opción legítima. No la veo ni buena ni mala, en si misma. Creo que nadie
serio y desapasionado lo sabe. Depende, principalmente, de cómo se llega a ella, de la
legalidad o no del proceso y de los vínculos de todo tipo que puedan romperse entre gente
que lleva siglos conviviendo. Como dice Iceta: 'sobre los sentimientos no se
debate'. Y menos aun, se juega o manipula, como se está haciendo para rédito político y ambición de poder. El federalismo o
un autonomismo más claro
y blindado, parecen más
viables. La independencia puede ser buena o mala, depende de como se use, pero
en estas circunstancias quizás no sea la opción mejor, por muy romántica y feliz que se la pinte.
- ¿Que teme más, la
independencia o los independentistas?
-
- Sin duda los
independentistas radicales, no todos claro. La independencia, por cauces
normales, no es temible, por ningún motivo. Solo lo es si con ella se pretende
desviar la atención de los ciudadanos de sus problemas, si se quiere tapar con
su 'ilusión' un mal gobierno, o si ha de servir para crear un feudo de un clan
privilegiado o corrupto, sin otro control que los del clan. El famoso 'oasis
catalán' ha sido un engaño para
innocentes. Han salido ya muchas pruebas de ello.
- ¿Cuál es la
mejor opción para el
futuro de Catalunya?
-
- Seguramente, el
federalismo clásico moderno, o un autonomismo bien definido y debidamente
blindado, como he apuntado antes. Son, además, las opciones que encontrarian
mejor acomodo en la vigente Constitución, que ya distingue entre regiones y
nacionalidades, y por tanto las más viables, sin tensiones ni desafios de matón
de barrio. Ha sido un gravísimo error de los gobiernos centrales, no haber sido
fieles a lo establecido en esta Carta Magna, la mejor que ha tenido el país.
- Hablemos de
periodismo. ¿Qué futuro le augura al oficio?
- Si hablamos de 'oficio' empezamos mal. Todos los
oficios son dignos, pero las profesiones obligan a algo más: profunda vocación y libertad moral.
Periodismo, para mi, es una profesión, como la de médico o abogado. Como tal, tiene futuro si no se
prostituye y si cumple su función de servicio público: informar verazmente, sin hipotecas, con
libertad y honestidad, y contextualizando la información para que pueda ser
entendida y valorada por el lector, oyente o televidente. Los gabinetes de
prensa y muchos de los programas de radio y televisión no tienen nada que ver con
el periodismo; son otra cosa.
-
Cualquier tiempo periodístico pasado
fue mejor?
-
Evidentemente,
no. Pero ahora se hace un periodismo demasiado partidista, poco responsable o
frívolo,
con grandes y ejemplares excepciones.
Durante la Transisción se
hizo un buen periodismo; el Estado intervenía poco y las empresas aun no se atrevían demasiado. Y los profesionales
se sentian llamados a la gran tarea de recuperar la libertad y la democrácia, no a la lucha de
trincheras políticas.
-
¿El auténtico periodismo ha muerto a manos de la
tecnologia?
- La tecnologia es una ayuda, no una limitación. Abre
posibilidades, no las destruye, si el profesional sabe servirse de ella y no
someterse a la misma.
-
El periodismo del futuro, ¿lo harán las máquinas?
-
Las máquinas no hacen el hombre, es
el hombre el que hace las máquinas. El periodismo es cosa de hombres...
(Diario de
Tarragona. 12.8.14)