Comentarios y Análisis de Política

jueves, 16 de junio de 2011

Democracia en helicóptero

Preocupante imagen en torno al Parlamento de Cataluña. Cuando para reunirse en pleno la presidenta de la Cámara, el presidente del Gobierno y varios de suspensión Miembros, incluido el responsable de Seguridad, y algunos Diputados Deben desplazarse en helicópteros para burlar la barrera de una masa de "indignados" que impedía apoyo entrada, algo Importante, de fondo y de forma, ocurría en el país y socava Nuestra democracia.
Una democracia no puede refugiarse, Viajando en helicópteros o en furgones de la policía, para rehuir la responsabilidad decumplir y acero cumplir la voluntad popular expresada en las urnas. No puede aceptar esta humillación por el despecho dealgunos de los "indignados" que están Perdiendo el norte, deveniendo violentos, y con Ello apoyo inicial legitimación.No se concebible imaginar, aunque sea en otro contexto mucho más grave, que un Adolfo Suárez o Gutiérrez Mellado sehubiesen echada al suelo, en lugar de hacer frente, Cuando el dramático "tejerazo" en el Congreso de los Diputados. En el casodel boicot de unos exaltados al Parlamento catalán, han fallo la previsión y el, ejercicio de la autoridad. Y la humillación se ha impuesto en la dignidad, cuyo respeto cuidado se reclama.¿Qué habrá Hecho, en semejante caso, el presidente Jordi Pujol?Después han venideras y vendrán todo tipo de reacciones,verbales o fácticas, pero el daño está Hecho. Cuando se Tienen competencias y con razón se reclaman más, hay que demostrar, en Todos los campos, que se saben ejercer como corresponde. Cataluña no es un Estado, pero se Estado en la parte que le corresponde. Su Parlamento y apoyo Gobierno No puedo funcionar a base de helicópteros.Si no se afrontan los problemas, de fondo y de forma, que tiene el país y se acepta esta humillación de Nuestra democracia se corre el riesgo de que un día (¡Dios no quiero!), No ya en helicópteros, sino que la veamos huir en globo.

sábado, 4 de junio de 2011

Una Plaza para los Indignados

Una "Plaza de los Indignados", pido. Una plaza para los "indignados". Una "Plaza de la indignaciones". Se la llame como se quiero. Con tres Requisitos:

- Que sea para todos los Ciudadanos indignados.

- Que sea un espacio público permanente, de discusiones libro y cívico, en que extiende prohibidas la violencia, el insulto y la calumnia.

- Y que este acotado en Lugar no molesto para la ciudadanía, protegido y reconocido legalmente.

Sería, pienso, una buena salida al actual legítimo movimiento popular, que expresa, Básicamente, un descontento generalizada con lo que ocurría en la vida pública del país y con la forma de gestionar esta vida pública.

Una vida pública que Tiene directa a y brutales cosecuencias en la vida privada de millones de Ciudadanos. En el económico, en lo social y en lo político. Una vida pública que Merece ser gestionada de forma diferente y por gestoras distíntos.

No se seguro que haya que ir a otro "sistema", como piden los antisistema, sino aportar uno nuevo claro y suficientemente avalada. En todo caso hay que cambiarlo, transformarlo, en Profundidades. Para que la participación ciudadana sea más auténtica y la ética impere en la gestión en Todos los campos.

Para una transformaciones profundas, que no venderá nunca de los confortablemente instalados en el sistema; se necesaria la colaboración, decisiva, de los "indignados", de Todos los indignados serio, preparados y responsables.

Esto necesita una vía espontánea de libre expresion, distinta a las actuales Demasiado Comprometidas con los "instalados" y los organismos representaivos de suspensión intereses. Además de las vías de las nuevas tecnologías, Hace falta que las diversas voces ciudadanas Sean oidas con la calidez de apoyo sinceridad, y directamente, sin intermediados a sueldo de no se sabe siempre quién.
Un foro permanente, público y espontánea, podría ser ésta nueva vía alternativa. Los manifiestos y contramanifiestos no coducen a ninguna parte, solo a contrarrestarse ya desprestigiarse mutuamente. Y un movimiento como el surgidas esta primavera merece otra cosa. Que se le tome en serio y sea escuchado.

Más allá de gestos más o menos folklóricos o extremosos, hay una corriente de fondo generalizada.
Y hay que darle cauces libros y nítidos, sin descalificaciones ni porras.
Y el movimiento, esparcidas en nuestras principales plazas, loque la autoridad no ha
Sabido prestar oído fino, para escuchar ydar vía adacueda, quita un inequívoco y fuerte rumor de torrente revolucionario.
No todo lo creativo está dentro del corsé de la legalidad, más allá de esta también hay vida.